martes, 8 de enero de 2013

¿Sabemos comportarnos?


El protocolo surge de la necesidad de relacionarnos que tenemos los seres humanos a través de unas normas y costumbres que permiten desenvolvernos en cualquier situación dando una imagen de nosotros para los demás. Las claves fundamentales son: saber estar, saber ser y saber relacionarse.

Existen muchas variedades de protocolo, como pueden ser el protocolo real, el protocolo institucional, el protocolo deportivo o el protocolo social, entre otros.

En este caso vamos a hablar sobre el protocolo social, que es el que interesa a la mayoría de  las personas, ya que es el que usamos cada día en nuestra vida diaria. 
Nos referimos a un tipo de protocolo en el que, en cualquier acto público o incluso en el día a día debemos regirnos por una serie de normas sociales y morales que deben conocerse, respetarse y cumplirse para que podamos interactuar con el resto de las  personas que nos rodean.

Vamos a ir detallando una por una:

1. El saludo: Se expresa con gestos, palabras o miradas. El apretón de manos es la forma más correcta para saludar a personas que no conocemos, intentando que no sea ni muy fuerte ni muy flojo, sólo con firmeza. El beso solo  hay que darlo a aquellas personas que sean familiares, personas cercanas o con las que tenemos confianza.
Si a quién vamos a saludar son personas importantes como los Reyes de España, el Príncipe de Asturias o alguien de la casa real, el saludo será muy diferente. Para saludar a la Reina, los hombres deben inclinar la cabeza y llevar la mano de ella hacia sus labios pero sin llegar a rozar, en el saludo al Rey primero inclinará un poco la cabeza y luego la levantará y le dará la mano. Las mujeres saludan de forma distinta, tanto al Rey como a la Reina le hará una reverencia, dándole la mano y mirándole a los ojos, inclinando la pierna izquierda detrás de la derecha.



2. Expresiones: Para una primera impresión con un "encantado de conocerte" o similar, mostrando una pequeña sonrisa basta, no hace falta ser muy original a la hora de expresarte ni tampoco sonreír demasiado ya que puede causar sensación de falsedad.
La mirada también se considera importante a la hora de comunicarnos, a través de nuestros ojos se pueden expresar muchas cosas, por eso debemos mirar a nuestro interlocutor cuando nos comunicamos con él.

3. Gestos: Dependiendo de los gestos que hagamos en determinadas situaciones, se puede mostrar una sensación u otra a la persona con la que nos estamos comunicando:

          - Gestos faciales: El hecho de arrugar la nariz o arquear las cejas ya estamos mostrando sin palabras    como nos sentimos en ese momento. Dependiendo del gesto que hagamos podemos expresar alegría, tristeza, ira, sorpresa, miedo...


            - Gestos corporales: A veces, incluso sin darnos cuenta, tendemos a mover mucho las manos cuando hablamos, o guardarlas en los bolsillos, o cruzar los brazos... cada una de estas acciones tiene su significado. Por ejemplo, si te muerdes las uñas muestras nerviosismo, y si cruzas los brazos inseguridad. Por ello, debemos de estar pendientes de las posturas que adoptamos para no dar una imagen que no queremos.

A continuación mostraremos algunos de los gestos con sus respectivos significados:
         - Entrelazar los dedos: autoridad
         - Frotarse las manos: impaciencia
         - Inclinar la cabeza: interés
         - Frotarse la nariz: dudas

4. Modales: Son normas de conducta que demuestran que una persona es correcta y educada, mostrando respeto y cortesía hacia otras personas. Como por ejemplo, el hombre que abre la puerta y deja que la mujer pase primero, o en el autobús, dejar el asiento a personas mayores o mujeres embarazadas.


En el vídeo se puede ver como el gesto de caballerosidad en los hombres se ha ido perdiendo con el tiempo,  ¿a que puede deberse? Estuve preguntando a algunas personas del género masculino y obtuve las siguientes respuestas:
           Chico 1.  - " Puede ser porque las mujeres ya no son tan femeninas como antes, es decir, se han vuelto más independientes, ya no nos necesitan tanto ni necesitan esa protección del hombre, y poco a poco con el tiempo nos hemos acostumbrado a no estar tan encima de ellas".
           Chico 2. - "Yo pienso que las personas cada vez vamos más a lo nuestro y por eso ya no nos preocupamos tanto de satisfacer a nadie, ni siquiera a la mujer, no es que nos queramos, sino que nos ha tocado vivir en esta sociedad donde no nos han enseñado a ser el tipico caballero".

Y también quise saber que opina el género femenino, fíjense lo que piensa esta chica:
          - " Creo que gran parte de "culpa" la tenemos las mujeres de hoy en día  que les liberamos de lo único que durante generaciones pertenecía por derecho... ¡el arte del cortejo! Por otro lado, también tiene mucho que ver el tema de la igualdad, la caballerosidad se pierde desde el momento en que les hacemos ver y les demostramos que una mujer es igual en derechos que un hombre... cuando el hombre es algo más machista suele ser mas caballero,  creo... siempre hay excepciones, claro que  algunos que no saben bien distinguir entre caballerosidad y machismo, lo confunden y lo llevan al plano de la pareja; yo creo que son menos caballeros los chicos que tienen un alto sentido de la equidad e igualdad. La caballerosidad se aprecia más en aquellos hombres que ven a una mujer como un ser frágil y necesidad de su protección; una visión algo machista, pero que cuando no es exagerada y también va de la mano de la admiración hacia la pareja a mi personalmente me gusta mucho".

5. Educación: A través de nuestras acciones y actitudes mostramos la clase de educación que hemos adquirido durante nuestra vida. También influyen los conocimientos que tengamos, valores, costumbres, cultura...
Por poner un ejemplo, se considera una falta de educación ser impuntual, dejar a alguien esperando no es plato de buen gusto.

6. En la mesa: Aquí también existen unas normas de protocolo más o menos estrictas dependiendo del tipo de acto al que asistamos. Si es la típica cena entre amigos o familiares, las normas serás más bien morales, sentarse bien, comer con la boca cerrada o no empezar a comer hasta que estén todos sentados. Si se trata de algo más formal, una persona o dos presiden la mesa, normalmente los anfitriones, o el invitado de honor, los demás invitados se sientan organizados según un orden de preferencia, los cubiertos también llevan un orden de uso, las servilletas no se usan todo el tiempo y debe ser de forma discreta...




En la organización y preparación de la mesa hay que tener en cuenta muchas detalles, sobre todo si es una cena formal e importante:
- Los manteles deben estar bien limpios y planchados, que sean largos pero procurando que no arrastren en el suelo, el color preferente es el blanco, y encima se coloca un salva mantel que también suele ser blanco pero puede ser de otros colores, depende del evento.
- Los centros de mesas deben ser elegantes y que no sean muy altos ni ocupen mucho espacio en la mesa, para que los comensales pueden verse desde un extremo a otro de la misma.
- Para empezar a montar la mesa empezamos con la vajilla colocando un plato base por comensal,que nunca se retira, y encima de éste se coloca un plato llano y otro plato hondo encima. Una vez que termina la cena y se retiran estos dos platos, sigue quedando el base para poner encima el postre.
- Los cubiertos se colocan de fuera hacia adentro con este orden: en la parte izquierda, un tenedor de entremeses, tenedor de pescado y tenedor de carne, si hubiera cuchara sopera iría entre el tenedor de entremeses y el de pescado; en la parte derecha, el cuchillo o pala de pescado y el cuchillo de carne. La cuchara de postre va en la parte superior del plato base. El plato panero se coloca a la derecha del comensal.
- La cristaleria, en el sentido de fuera hacia adentro con el siguiente orden: copa de agua, copa de vino blanco y copa de vino tinto, la copa de champang se coloca en la parte superior entre las dos copas anteriores.
- Las servilletas van encima de los platos bien dobladas y colocadas, pudiendo formar alguna figura.



La colocación de los invitados debe ir por orden de preferencia desde el anfitrión, colocando a su derecha al primer invitado, a su izquierda al segundo... y así hasta que estén todos posicionados. Dependiendo del tipo de mesa y del numero de anfitriones puede haber una presidencia o dos.
Existen dos sistemas de presidencia:



El sistema de presidencia francés consiste en una o dos personas que presiden la mesa en el puesto central del lado mas ancho de la misma. El resto de invitados, por orden de preferencia se alternan de derecha a izquierda a partir de la derecha de la presidencia. Es el sistema de presidencia más utilizado a nivel internacional.

En el sistema de presidencia inglés, la persona o personas que presiden la mesa, se sientan en las cabeceras de la misma. El resto de invitados se alternan de derecha a izquierda, por orden de preferencia, a partir de la derecha de la presidencia.


7. Eventos sociales importantes: Tanto los organizadores como los anfitriones deben tener en cuenta muchos detalles para que todo salga perfecto. Respecto a la responsabilidad económica  estos eventos pueden ser patrocinados, autofinanciables o pagados. La decoración adquiere una gran importancia, ya que la apariencia es lo primero que entra por el ojo, tanto las mesas, las paredes, los colores empleados, la música,... todo debe ir al detalle, creando un ambiente propicio para tal ocasión. La organización del evento debe llevar un orden coherente, para que el personal invitado se sienta a gusto en todo momento, disfrutando de la creatividad y originalidad depositada en dicho evento. No olvidar contratar a un fotógrafo, y si el acto requiere demasiada importancia avisar a los medios de comunicación.

8. Vestimenta: La indumentaria necesaria que se suele usar para determinados actos es la etiqueta.
Hay dos tipos de etiqueta, la civil para personas en general que tienen una gran vida social y suelen acudir a este tipo de eventos, o incluso aquellas personas que acuden alguna vez a un acto social; y la militar, para actos más simbólicos como los militares o aristócratas, usando uniforme.
Dependiendo del acto al que asistamos o en el momento del día en que se celebre el acto usaremos un atuendo u otro:
En el hombre:

   




 - El Frac: Es la indumentaria de máxima etiqueta en el hombre.  Se usa en actos importantes que tienen lugar por la noche. Se compone de una chaqueta corta por delante y termina en dos picos por detrás. El pantalón de la misma tela y color que la chaqueta, que tiene que ser negro o azul oscuro.







- El Esmoquin: Se suele usar por la noche en acontecimientos donde no se precisa usar el frac. El color que lleva normalmente es el negro, aunque en verano también puede ser blanco o beige. Normalmente se lleva al final de la tarde y por la noche.














- El Chaqué: Depende de la estación del año en que se use, el chaqué puede ser en tela de vigoña en invierno y de alpaca en verano. Esta indumentaria se usa por el día hasta antes del anochecer. Coloquialmente se le llama traje de pingüino, por ser mas largo por detrás que por delante. Los colores que llevan este atuendo son el negro o el gris oscuro.







La etiqueta de la mujer es muy diferente, y también depende del evento al que se vaya a acudir y el momento del día en que tenga lugar el acto:

 





 - Traje largo o vestido de noche: Es la máxima etiqueta en la mujer, elegante y sofisticado, es un vestido que llega hasta el suelo tapando los pies. Equivale al frac del hombre.















- Vestido de cóctel: Se considera un atuendo de media etiqueta, pero también puede acompañar al chaqué. Es un vestido muy elegante, pero algo menos que el largo. Es corto hasta la rodilla y muy apropiado para vestir durante la tarde y la noche.









Vestido corto para fiesta de color azul 2 Vestido corto para fiesta de color azul







- Vestido corto: Es el equivalente al chaqué,  se lleva por la mañana o a media tarde y puede acompañarse con una pamela o una mantilla. No es tan elegante como los dos anteriores pero es muy apropiado para la ocasión.







9. El protocolo a nivel mundial

Cada país, debido a sus costumbres y culturas, que lo diferencian del resto del países del mundo, tiene su propio protocolo, sus propios modales y normas de conducta.
El protocolo viene de hace muchos años atrás, originado en Egipto, promovido por la iglesia. Desde entonces se fue extendiendo hacia otros países y adaptándolo a sus modos de vida.
Sin embargo, también existen conductas que comparten algunos países, como por ejemplo el saludo, que es una norma de cortesía prácticamente en todo el mundo. En Arabia Saudí,  para saludar tienen la costumbre de dar la mano, al igual que en España, entre otros muchos países, con la diferencia que ellos utilizan la expresión Assalam Alaikum cuando les presentan a alguien, y la otra persona debe responder con un Alaikum Assalam, que viene a decir algo así como "la paz esté contigo" o "¿Cómo está usted? yo bien, ¿y usted?". Además tampoco mantienen la mirada cuando se saludan porque  ellos pueden interpretarlo como una actitud desafiante, así que es preferible mirar hacia abajo. En África  el saludo es un apretón de manos durante unos segundos y además una leve inclinación de cabeza, como señal de respeto. Los que tienen creencia musulmana no suelen tener contacto con las mujeres de su país. Éstas, apenas están valoradas por los hombres en los países musulmanes, y su presencia en los actos sociales carece de importancia. Hay otros países con normas algo mas distintas, como por ejemplo en China; allí el saludo normalmente es una leve inclinación de hombros, acompañado por la expresión "Ni hao" que significa "¿Cómo está usted?". No les gusta demasiado el contacto físico ni que los miren a los ojos mucho tiempo. A pesar de tener unas normas de protocolo tan diferentes al resto de muchos países, suelen ser muy tolerantes a la hora de adaptarse un poco a las costumbres de los extranjeros, aunque tienen dos normas claves que las llevan en toda regla y son el respeto a la jerarquía y la imagen de su entorno profesional. Son muy respetuosos, por eso les gusta que también lo sean con ellos  y la falta de éste, por muy leve que sea o aunque no sea intencionada, puede ser malinterpretada.